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Niño contempla el descenso de las aguas en Macuspana, Tabasco, Foto: Alán Aguirre

Mientras la región atraviesa la crisis sanitaria de la pandemia, dos huracanes, “Delta” y “Zeta”, han azotado a los estados de Quintana Roo y Yucatán. Posteriormente, la tormenta tropical Cristóbal afectó también al estado de Campeche y Tabasco. 

Actualmente, Tabasco es nuevamente azotado por las inundaciones debido a las afectaciones producidas por los remanentes del huracán ETA; a esto se agregó la presencia del frente frio No. 11 con precipitaciones pluviales en la zona y lluvias torrenciales en el estado vecino de Chiapas. 

Esto provocó que los escurrimientos se derramaran en cinco principales ríos que atraviesan el estado: Usumacinta, Puxcatán, Samaria, Carrizal y Grijalva. Lo que ha dejado más de 150,000 damnificados en todo el estado de Tabasco.

De acuerdo a los reportes de las Asociaciones y Misiones, en el territorio del Sur de Tabasco hay 993 familias afectadas, mientras que en el Este de Tabasco suman ya 685 familias y más de 2,100 en el Centro de Tabasco; haciendo un total de 3778 familias adventistas afectadas.

 

 

Vista de la colonia El Castaño en el municipio de Macuspana Tabasco,

en este sitio viven cerca de 25 familias adventistas que han sido fuertemente afectados

Foto: tomada de Facebook

Las inundaciones han dejado innumerables daños en las poblaciones rurales y urbanas. De igual modo, en varias ciudades importantes del estado, como en el caso de Macuspana, que fue severamente afectada por el desbordamiento del rio Puxcatán. En aquel municipio se localiza la colonia El Castaño donde viven varias familias adventistas que perdieron todo, debido a que los niveles de agua alcanzaron más de dos metros ocultando las casas. Las familias fueron evacuadas y ubicadas en distintos albergues municipales y con familiares para preservar sus vidas.

 

 

Una de las primeras acciones que las administraciones tomaron fue distribuir víveres para los hermanos y para los habitantes de las comunidades. En las bolsas de despensas que se han entregado se ha aprovechado la oportunidad de testificar al incluirse un libro de esperanza para que las personas encuentren alivio.

 

Se han instalado 38 albergues en las diferentes Iglesias de las asociaciones de Tabasco para proveer alimentos para cerca de 840 personas, también se ha provisto a los damnificados de atención medica, psicológica y espiritual. A los niños se les atiende con actividades bíblicas, mientras se comparte la Biblia y las alabanzas entre las personas.  

Voluntarios preparan despensas que serán llevadas a diferentes comunidades en

 el interior del estado y a las colonias anegadas en la ciudad de Villahermosa Tabasco

Foto: cortesía Asociación Centro de Tabasco.

 

De los templos existentes en el estado, un total de 102 fueron inundados. Sin embargo, hasta el momento solo 9 se reportan con pérdidas en sus mobiliarios, equipo de sonidos, sistema eléctrico e infraestructura.

 

 “En la localidad de Pomoca, nuestros hermanos han sido fuertemente afectados; sin embargo, ellos se han apoyado dando auxilio por medio de alimentos calientes, ropa y un lugar para descansar”- comentó el Pr. Humberto Lara, presidente en la Asociación Sur de Tabasco. Añadió que los pastores realizan brigadas de apoyo para atender a las familias afectadas en los distritos de Jalapa, Las Mercedes, Sarabia, Oxolotán y Tapijulapa, lugares que fueron fuertemente afectados.

 

 

 

Vista de la Iglesia Pomoca II. Los miembros lograron rescatar algunas bancas y enseres de

En el fondo se observa la corriente del rio Puxcatán desbordado.

Foto: Cortesía MJ Sur de Tabasco

Eugenio Mendoza presidente de la Misión Este de Tabasco, mencionó que esta muy agradecido por la generosa respuesta de los distritos que no fueron afectados para ayudar a los distritos anegados. Por medio de esfuerzos coordinados con los pastores, las Iglesias principales de los distritos se han convertido en centros de acopio de víveres y ropa. De igual forma, algunos hermanos han hecho depósitos en efectivo para adquirir más víveres.

 

En el fraccionamiento conocido como el Amate, lugar donde viven pastores, profesores, colportores y personal que labora en las oficinas de la Asociación Centro de Tabasco, 16 familias fueron totalmente anegadas y perdieron sus enseres. “La barda de contención del fraccionamiento no soporto la presión del agua y en poco tiempo fueron inundados”, aseveró el Pr. Adán Cortes, secretario del campo.

 

El Colegio Adventista en la ciudad de Villahermosa, Nicanor González Mendoza, también se unió en colaborar para ayudar a los habitantes de la región de Villa Parrilla, ya que las fuertes crecientes impidieron el paso de vehículos pequeños a la ciudad para que las personas lleguen a sus centros de trabajo. A través del autobús escolar se transportó a decenas de personas sin costo alguno para poder cruzar la zona inundada.

 

La Iglesia de Macuspana, por medio del club Kalein desde el mismo comienzo participó en el apoyo y rescate de las personas que quedaron atrapadas en sus viviendas e instaló un campamento base con una cocina comunitaria desde donde se preparan 400 raciones de comida diaria que se transportan a los albergues y a las casas de las personas que no se mantienen anegadas.  A su vez tienen planes de limpiar en cuanto baje los niveles del agua, la Iglesia esta por adquirir bombas de presión para ayudar en la limpieza de las casas del lodo que dejó a su paso la inundación. 

Jóvenes de la Iglesia de Macuspana, reparten comida a las familias que permanecen en sus casas,

 mientras esperan que descienda las aguas. Foto: Iglesia Macuspana

“En medio de esta adversidad Dios ha intervenido de forma maravillosa” aseguró el Pr. Camilo Sánchez, presidente de la Asociación Centro de Tabasco, él narra que el día 11 de noviembre un equipo de voluntarios visitó la comunidad de Aztlan V, en los márgenes del rio Grijalva a unos 60 km de la zona urbana, para la entrega de víveres a 60 familias. Luego de llevar por vía lancha las provisiones, a su regreso se dieron cuenta que la gasolina se había terminado y que solo quedaba la reserva y faltaban todavía 40 km río arriba para regresar, mientras la noche caía se detuvieron al borde del río para orar y remar con palos y buscar una alternativa para conseguir combustible. Un lugareño apareció en las orillas y los guio hacia una población para conseguir gasolina. 

Dios obró de forma milagrosa al resolver este problema. Mientras ellos regresaban con combustible, otra lancha de hermanos se acercó con gasolina para auxiliarlos y de esta forma, llenaron el tanque y terminaron de llegar hasta la ciudad.  “Allí vimos la intervención de Dios”, añadió Camilo Sánchez.

En la comunidad Aztlan V, un equipo de brigada lleva atención a 60 familias incomunicadas.

 Foto: Cortesía Asociación Centro de Tabasco

El pastor Isaías Espinoza presidente de las Unión Mexicana del Sureste, en un mensaje enviado a los miembros de Iglesia en Tabasco mencionó: “Como Iglesia nos tenemos el uno al otro, confiemos en el Señor, Él esta con nosotros, no desmayemos”. La administración de la Unión hizo un recorrido por la ciudad de Villahermosa para evaluar los daños y para dar atención a los miembros de Iglesia que junto con las Asociaciones y Misiones han logrado un fondo de más de $ 2,500,000.00 para atender la contingencia. Unido a este esfuerzo las Asociaciones y Misiones que no fueron afectados, se preparan para recolectar víveres en las oficinas locales. Campeche, Norte y Sur de Quintana Roo y la Asociación del Mayab coordinan junto a los pastores estos esfuerzos de recolección de víveres para hacer llegar a las familias afectadas en el transcurso de las próximas semanas.

 

Dios ha sido bueno al preservar la vida de los miembros de la Iglesia, mientras se espera que el próximo sábado 21 de noviembre las iglesias locales en las asociaciones y misiones no afectadas puedan ofrendar en favor de esta necesidad. 

 

Editor: Pr Víctor Martínez Bautista

Coordinador de Noticias

Unión Mexicana del Sureste